Por Braulio Costa

La empresa Brainwork empezó en el 2016 con un par de amigos que compartían la misma preocupación: más de 800 000 chicos no logran entrar a la universidad, porque año tras año pierden la oportunidad de ingresar a la carrera de sus sueños. El principal reto es ese, enseñarles a ver el futuro y a cómo cumplir sus expectativas. Y si no las tienen claras, se bloquean. El principal reto es identificar su vocación.

Como padres queremos influenciar en ellos, pero lo que debemos buscar es que sean felices y cumplan sus metas. De qué van a vivir decimos nosotros, pero lo harán bien si se apasionan de su trabajo, empresa y metas.

Lo que les gusta de niños es un primer determinante.

Hoy el mundo ha cambiado y la oferta no se alinea con la velocidad que el mundo exige. Antes era la revolución industrial y ahora la digital. Como padres ¿qué estamos haciendo? Necesitamos que aprendan matemáticas, pero no es la carrera más atractiva. No se necesitan más médicos tradicionales sino la nanomedicina, por ejemplo. Los siguientes 35 años van a cambiar muchísimo, las familias no tendrán tantos hijos sino que estarán compuestas por personas mayores con una mascota. Entonces hay que informar a los chicos hacia dónde vale ir, dentro de lo que les apasiona.

30 000 chicos compiten en las universidades públicas. Como estudiante hay que prepararse aún en vacaciones porque en la línea de partida hay todos esos chicos esperando el cupo. También las universidades deben propiciar las carreras que serán útiles en el futuro. En el segmento medicina sucede que las enfermeras están jubilándose, pero no se llenan esas plazas porque no es una carrera atractiva.

¿De qué se trata el implementar un sistema de creencias positivo y con base en valores? Depende del lado del cerebro en el que trabajes. Nos enfocamos mucho en el conceptual y no tanto en la inteligencia emocional. Las personas son los ejecutores y todos queremos tener conexiones, contactos. Somos cerebro-emocionales y más los latinos. Tienes los conocimientos y vas al Senesit, llegas nervioso y fallas en el examen. Dormir bien, hidratarse bien, hacer ejercicio y estar preparados en sinergia con sus tres cerebros, y vas a lograr pasar el examen.

Todos tenemos un sistema de creencias y si este es negativo, nuestro accionar será negativo, y seremos personas tóxicas. Si va a tomar una decisión, va a errar por ese sistema de creencias. Se trata de impulsar el liderazgo de los jóvenes en cualquier nivel: político, social, económico. Por ejemplo, mi hijo y yo decidimos subir al Pichincha, podíamos ir en el Teleférico, pero fuimos por el trayecto de caminar para arriba y aprendimos mucho. Él estuvo a punto de renunciar. Podía volver y comprar el ticket pero para un chico que quiere especializarse en fútbol, tiene que pagar el precio. Subir la montaña es un reto y como dice Iván Vallejo, si llegas hay que bajar de la cima para elegir otra montaña.

Empecé mi empresa Brainstorm despacio. Nos enseñan que la CFN nos puede dar un crédito, pero si tú quieres crear una empresa y dar empleo, inicia pequeño. Empezamos con el apoyo de 4 inversionistas.

Mi grupo objetivo eran los chicos, pero también los padres. Los dos tienen la misma necesidad y hacia allá va mi comunicación. Y los colegios son mis proveedores naturales. El colegio y el pre-universitario son quienes forman al chico y luego yo complemento con otra formación.

Los chicos buenos para todo tienen que enfocarse. Debe ver en qué quieren especializarse. Y al ir hacia allá poner toda la energía. En mi vida empresarial el coaching me ayudó a aclarar mi norte. Los componentes que deben introducir en su análisis son creatividad, innovación y diferenciación.