Programa en Radio América 3/6/2019 – Aplica estos 10 buenos hábitos para manejar el dinero

 

Por Sandra Rodríguez

¿Qué mitos tiene el dinero? Y por qué hay que romperlos.

“Que el dinero es malo o es sucio”, no es así, el dinero es un medio legítimo para solventar los gastos diarios y para crecer y producir. Pensar así es negativo, es de pobreza y escasez y nos lleva a la pobreza y a la escasez. Hay que tener pensamientos de abundancia.

Que “el dinero ya ha de llegar de algún lado” es un error. El dinero no va a llegar sin hacer esfuerzo o trabajo. En las escuelas, colegios y universidades ya les enseñan a los chicos a emprender, a tener una mentalidad diferente, a saber que al dinero uno mismo debe buscarlo. Desde muy joven se pueden lograr los objetivos. En las generaciones anteriores creíamos que debíamos seguir una cronología fija. Los jóvenes nos demuestran todo lo contrario, que no hay una línea establecida y se puede crecer siendo joven aún.

Otro ejemplo de mentalidad escasa en lugar de abundante es decir frases hechas como: “Aquí como cuando vos eras pobre” o “Soy pobre nada tengo”. Es una mentalidad retrógrada que te mantiene en un estado de inmovilidad que no te permite superarte. Hay que transmitir mensajes positivos: Estoy bien, tengo una linda familia, me va bien. Eso se hace realidad. Un amigo, Mario Arias cuando se le pregunta, cómo estás dice: “de excelente para arriba”. Eso se contagia al resto.

Dar importancia a los ingresos pequeños. Todo suma, cada centavito cuenta, y también cosas pequeñas te hacen gastar y reducir tu presupuesto.

“Cuando gane la lotería seré feliz”, es una frase negativa. El dinero no es sinónimo de felicidad, Es solo un medio para obtener artículos o soluciones. La satisfacción llega por otro lado. Mucha gente que guarda el dinero sufre y luego se enferma. Muchos famosos ganan dinero de la noche a la mañana, pero luego están sin poder salir ni a la calle, viven amargados, porque les falta el amor, la familia, amigos reales.

Ser rico, o querer tener más dinero también puede verse mal. Desde pequeños hay que enseñarles que no es malo tener dinero bien habido, enseñarles de dónde viene ese dinero. Es común oir a los niños que cuando la mamá les dice que no tiene dinero, ellos dicen: ¡Anda al cajero y sacas!

Buenos hábitos que debe tener el microempresario (y toda persona):

PRIMERO: Presupuesto mensual y anual: cada mes debemos anotar los ingresos que tuvimos y día a día los gastos. Basarse en esta fórmula. Del 100% de ingresos, el 50% van a los gastos regulares, alimentación, salud, educación; el 40% va a pago de deudas, gastos de consumo: zapatos, ropa, alguna diversión. Y el 10% al ahorro.

SEGUNDO: Esta famosa fórmula 50-40-10 debe ser aprendida siendo niño. Por ejemplo, como un ejercicio podemos enseñarles a los hijos a ahorrar y luego les pedimos un préstamo. Es divertido, pero así valoran su dinero.

TERCERO: El ahorro debe ser como tu primer pago. Si los gastos han superado los ingresos, la fórmula ya no funciona, hay que pensar por donde recortar y generalmente es por estos gastos no básicos. Se identifican con este concepto: si es un deseo o una necesidad, y es en los deseos donde se debe recortar.

CUARTO: Cuidar los gastos pequeños: las mujeres cada fin de semana vamos a la peluquería o a las uñas. Si en vez de hacer de eso una rutina permanente, puedes no ir, y aprender a peinarte tú misma, puedes ahorrar por ahí. Cada persona sabe cuál es su prioridad. Tal vez para otras personas esto no sea negociable. Yo voy al cine, por ejemplo, es lo que me emociona, me hace soñar. Es un deseo importante.

QUINTO: Coordinar la economía del hogar con la pareja: conversas con tu pareja, llegas a un acuerdo, y resulta que la esposa ve una cartera y unos zapatos y los compra. Se rompió el compromiso. O tú ahorras y viene el esposo con algún auto-lujo para el carro. Hay parejas que pueden terminar por esta razón. Por eso hay que hablar claro antes de vivir juntos. Se dice que cada niño viene con una palanqueta bajo el brazo, pero realmente no es así, mientras más crecen cuestan más. Y ahora no quieren irse de la casa, siguen costando. Las nuevas generaciones siguen apoyadas en los padres. Un bebé es un cambio total en la vida y no solo es económico. Es algo que hay que evaluar antes de casarse o vivir juntos pues si llegan a separarse los niños pagan las malas decisiones de los padres.

SEXTO: Si se tiene tarjeta, pagar más del mínimo, pagar a tiempo, llevar control de los diferidos, tener máximo 1 ó 2 tarjetas: si no puedes pagar en efectivo puedes diferir, ese rato te sirve la tarjeta. Pero te llaman y te convences, que saques otra tarjeta, que te vas a ganar premios, que te dan descuentos, que te dan acceso a cadenas, y te llenas de tarjetas. Luego un sábado sales de compras y acabas con el presupuesto.

SÉPTIMO: manejar bien la tarjeta de crédito. Los consumos corrientes debes pagarse en corriente, si es algo caro y necesario, vale la tarjeta para diferirlo. Con los diferidos lleva un Excel o en la hoja de contabilidad y anotas qué está diferido y vas restando de tu ingreso esa cuota mensual. Así llevas control. Si pagas el mínimo es una deuda que se va generando interés tras interés, y se hace una bola de nieve. Entonces haces avances. Y la deuda se vuelve la historia de nunca acabar. Al principio no te das cuenta, pero luego se acumula.

OCTAVO: no hay que prestar a nadie la tarjeta, así sea el familiar de confianza, ¡cuidado! que siempre es de uno la deuda. El familiar o amigo cumple las primeras cuotas y luego pierde el trabajo y no paga… y uno asume la deuda. Se termina dañando la familia y la amistad.

NOVENO: Tener metas familiares importantes y sumar a los hijos grandes y chicos hacia ese norte: estamos a punto de acabar el año escolar en la sierra, y uno dice qué voy a hacer con mis hijos y llega el curso vacacional que cuesta 200 dls. Debimos haber ahorrado mes a mes para eso. Así no nos endeudamos con algo que se sale de nuestro presupuesto. Agosto y septiembre son meses complicados por el ingreso a clases, por eso hay que planificar todo el año. July mensualmente guarda 100 dls para sacarlos en el mes de agosto. Son 1100dls que ocupa para libros, uniformes, matrícula. Así no compra a crédito los útiles, así no uso el décimo, que además es escaso. O ir guardando cada mes un cuaderno universitario, con eso ya tengo los 6 u 8 cuadernos para agosto.

DÉCIMO: El dueño de una microempresa debe invertir las ganancias, organizar las cuentas por cobrar y ¡cobrar! Reinvertir las ganancias para capitalizar el negocio, cobrar es importante, mucho dinero está ahí parqueado. Los colaboradores que piden préstamos y luego desbalancean la empresa. Ellos también tienen que ahorrar y ordenarse. El colaborador debe tener conciencia de cuidar a la organización. Y la empresa no debe solventar los excesos del colaborador. Esa mentalidad de austeridad es una cultura que hay que generar y hacerla de uno.